Luis Pedrosa Olavarría nació en Barakaldo (Bizkaia) un 13 de marzo de 1954. Hasta que fue adolescente, estudió en el colegio religioso “Hermanos de la Salle” y, posteriormente, cursó Maestría Industrial en la rama de electricidad. No obstante, la vida le llevó por otros derroteros y terminó siendo policía local, actividad profesional a la que dedicó 35 años de su vida. En la actualidad, Luis está jubilado y reside en Algorta (Getxo – Bizkaia).

Quienes conocemos a Luis sabemos que es una persona tremendamente vitalista, a la que le gusta exprimir todo el jugo que le pueda proporcionar cada instante de su vida pero, además, también nos confiesa que es bastante “inconsciente” en cuanto a la visión del peligro. Esa ausencia de miedo ante el riesgo es la que le ha llevado a practicar deportes como el alpinismo, barranquismo, rafting, submarinismo, volado en ultraligero, en parapente y alguna que otra locura más. Como anécdota, nos cuenta que tiene un amigo que, cuando debe presentarle a otra persona, suele decir: – Éste es Luis, de apellido “peligro” -.

Respecto a la fotografía, el caso de Luis podríamos definirlo como una “afición tardía tremendamente productiva”, pues aunque nos confiesa que desde su juventud se vio atraído a nivel de espectador por ella, no fue hasta 1995, cuando ya tenía 41 años, que compró su primera cámara fotográfica (analógica/compacta) y comenzó a practicar con ella.

De formación autodidacta, la disciplina de paisaje siempre ha sido su favorita y, con el tiempo, este intrépido fotógrafo se ha convertido en un artista de calidad indiscutible. Sus imágenes paisajísticas, tanto diurnas como nocturnas, no solo provocan la admiración de fotógrafos amateurs y profesionales, sino que en muchas ocasiones, su contemplación nos deja fascinados. La luz de sus composiciones, la nitidez de las tomas, los increíbles encuadres, todo, absolutamente todo, destila sublimidad. Y si tuviéramos que definir a Luis como artista, todo quedaría dicho con la expresión: “excelencia fotográfica”.

Muchas gracias, Luis, por permitirnos este acercamiento a tu persona y a tu trabajo fotográfico.